

Abrazo Colegio San José. En la mañana de este martes los concordienses se vieron sorprendidos por una fila de chicos vestidos de con el uniforme del Colegio San José Adoratrices de Concordia que rodeaba el edificio ubicado en calle Urquiza entre las calles Catamarca y Corrientes.
Ante la curiosidad de una lectora de Diario Río Uruguay, una de las integrantes de la Congregación de Hermanas Adoratrices Argentinas, la hermana Fátima, contó que esta actividad se enmarca en los festejos de los 140 años de la congregación y los 127 años del Colegio.
También detalló que las diversas acciones se extienden por todo el mes de septiembre, pero esta semana, desde el lunes 8 al viernes 12 de septiembre, está dedicada a los abrazos.
Septiembre Mes Adoratriz

En las redes sociales el colegio se remarca que son 140 años de amor y Adoración, teniendo en cuenta la fundación de la congregación en Argentina.
De esta manera, destacan que “es un mes tan especial para los adoratrices que no puede pasar desapercibido... Por eso queremos celebrarlo con mucha alegría”.
A la vez que anuncia que “será un tiempo donde habrá diferentes propuestas para compartir y dar gracias por tanto bien recibido”.
Cumpleaños
Si bien Colegio San José "Adoratrices" fue inaugurado el 5 de abril de 1898, en calle 9 de Julio entre Urquiza y Entre Ríos de la ciudad de Concordia, el 27 de septiembre de 1903, se realizó colocación de la piedra fundamental para la construcción de la actual edificación.
El Colegio

El Instituto San José Adoratrices está ubicado en Urquiza 772, Concordia, Entre Ríos, y ofrece educación nivel inicial, primaria y secundaria. Forma parte de la Congregación de Hermanas Adoratrices y se enfoca en la formación humana, profundizando la fe y basándose en la espiritualidad eucarística.
Orienta su educación hacia el compromiso con valores que fortalecen el juicio crítico y la entrega a los demás, teniendo a Cristo como modelo de servicio y a la Virgen María como ejemplo de fidelidad. Su propuesta educativa busca formar personas íntegras, promoviendo el crecimiento humano y espiritual a través del conocimiento, la fe y el servicio. El colegio fomenta la vivencia de la caridad, la humildad y el respeto, guiando a cada estudiante en su desarrollo personal y su vínculo con la comunidad.